La Asociación Española de Mujeres Empresarias de Madrid (ASEME) junto con la Asociación de Mujeres Empresarias de Móstoles (ASMEM) ha organizado unas jornadas dirigidas a las mujeres que están interesadas en crear su propia empresa y necesiten informarse sobre las diferentes ayudas, subvenciones y vías de financiación que tienen a su alcance, y qué organismos las ofrecen. Para ello, durante toda la jornada, se explicarán los principales trámites para la puesta en marcha de una empresa, los posibles nichos de mercado y nuevos yacimientos de empleo. Como complemento a las jornadas dos empresarias explicarán a los asistentes sus experiencias como emprendedoras y cómo iniciaron su actividad empresaria.
Madrid, 16 julio 2007. Un nuevo abanico de oportunidades para montar un negocio se abre para las futuras empresarias. “Los servicios de ocio y medio ambiente se están configurando como los nuevos nichos de mercado en los que poder invertir con garantías de rentabilidad”, afirmó Inmaculada Álvarez Morillas, presidenta de la Asociación Española de Mujeres Empresarias de Madrid (Aseme), en la jornada “La oportunidad de ser empresaria. ¿Quieres iniciar una iniciativa empresarial?”, celebrada hoy en la delegación que la Cámara de Comercio de Madrid tiene en el municipio madrileño de Móstoles.
Inmaculada Álvarez especificó los nichos de mercado más atractivos en el amplio sector del ocio: el turismo rural y cultural, la gestión de clubes deportivos, la organización de actividades culturales y de entretenimiento así como la creación de negocios relacionados con la valorización del patrimonio cultural. Otro sector en despegue en los últimos años es el de servicios medioambientales, entre los que la presidenta de Aseme destacó la gestión de residuos y la protección de zonas rurales.
Esta jornada pretendía asesorar a las futuras empresarias del suroeste de la región e informarles acerca de las diferentes ayudas y subvenciones que tienen a su alcance, así como facilitarles el contacto con los organismos que las ofrecen. La asistencia a esta jornada era gratuita, por lo que la Cámara ha contado para su organización con el patrocinio de la Consejería de Empleo y Mujer de la Comunidad de Madrid y por el Fondo Social Europeo.
Hay importantes líneas de financiación dirigidas específicamente a las emprendedoras y empresarias, entre las que destacan los microcréditos para las que deciden iniciar su actividad empresarial, por un importe máximo de 15.000 euros.
Además, el Instituto Oficial de Crédito (ICO) proporciona préstamos específicos tanto para las emprendedoras como para las empresarias ya establecidas. En concreto, financia hasta el 95% del proyecto, por un importe máximo de 25.000 euros. De éstas y otras ayudas que pudieran ser de interés en cada caso concreto se ofrece a informar la Organización de Mujeres Empresarias y Gerencia Activa (Omega).
Durante la jornada se expusieron las claves que ayudan a las emprendedoras a detectar nuevos nichos de mercado y yacimientos de empleo. Para ello, Inmaculada Álvarez recomendó tener en cuenta los cambios sociales, técnicos y legales a fin de detectar más fácilmente las lagunas en la prestación de productos y servicios, de manera que el esfuerzo emprendedor se concentre en la satisfacción de alguna necesidad.
Las asistentes a la jornada pudieron escuchar el testimonio de dos empresarias que iniciaron con éxito su negocio y que dieron a conocer sus propias experiencias. En sus exposiciones explicaron las ventajas y desventajas de convertirse en empresaria y advirtieron a las asistentes de los riesgos que implica emprender una iniciativa empresarial.
Las ponentes fueron Adela Gómez Gutiérrez, propietaria de Frade Ropa de Trabajo S.L., situada en el municipio madrileño de Alcorcón, y María de la Paz Mena Muñoz, gerente de Siloeches y Asociados, firma dedicada al asesoramiento y auditoría de empresas en Móstoles. En sus intervenciones expusieron las dificultades con las que ellas se encontraron al iniciar su negocio: desde problemas de financiación y de relaciones con los proveedores y los clientes, pasando por las decisiones para su proceso de constitución y adopción de la personalidad jurídica de la empresa, hasta las trabas burocráticas en el proceso de obtención de las licencias.
Casi una tercera parte de los empresarios madrileños son mujeres, mientras que en el resto de España este porcentaje apenas llega al 30%. El perfil de las emprendedoras las sitúa en edades de entre 36 y 49 años, casadas con uno o dos hijos y formación universitaria con estudios complementarios. La mayoría de las emprendedoras trabajan como profesionales autónomas (45,06% de los trabajadores españoles por cuenta propia son mujeres) y se dedican principalmente al sector servicios. Dentro de este sector, destaca su dedicación al comercio y la hostelería.